Un mismo motivo, para lograr ambientes diferentes. El primero, envejecido y asepiados, para espacios que podrían tener un toque del estilo colonial, las monocromias de lo clásico europeo aplicadas a un motivo austero, pero contundente, tanto por su tamaño (la flor ocupa todo un azulejo en medidas 10 x 10, 11 x 11 y 12 x 12), como por su sencillez.
En el segundo caso, vemos el mismo motivo, con los colores realistas que respondieron siempre a los estilos floridos. Recomendados para colocar por ML a un costado del espejo o a lo largo de toda la mesada del baño, sobre la bacha, pero sin exagerar, solo en esa pared.
Un pequeño detalle puede cambiar muchas cosas. Para bien y para mal. El toque tiene que ser justo. El color, la terminación y la disposición de los azulejos, son cosas que en comunión pueden darte el ambiente que necesitás con muy poco.
